Los muros infranqueables

La preocupación por la imagen de la mujer es prácticamente nula en la normativa europea, situación parecida a la que ha existido en España, a pesar que la Constitución establece derechos y valores concretos. María Luisa Balaguer (Balaguer, 2003: La regulación y el control de la publicidad en el ordenamiento jurídico constitucional español, Boletín de la Facultad de Derecho de la UNED, número 21), catedrática de Derecho Constitucional de la Universidad de Málaga, recuerda que el artículo 18 establece el derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen, lo que permitiría establecer una tutela de las mujeres frente a la utilización indiscriminada de su imagen y acogerse como colectivo al derecho fundamental al honor. “Al (honor) de nuestra dignidad como mujeres para que la publicidad no pueda desposeernos de ella, codificándonos y presentándonos como un objeto de consumo erótico, aditivo de una marca”.




Pero desde luego, queda mucho por hacer y el apoyo es casi nulo, en una sociedad de base capitalista es una labor casi imposible poder cambiar y regular una situación como la actual donde el machismo en la publicidad se traduce directamente en venta segura y ganancias multimillonarias. El principal activo de las empresas de bienes de consumo es la imagen de la mujer, la cual les reporta su fortuna, hay una relación directa entre imagen de mujer y ganancia. Así que la lucha por cambiar esta imagen de la mujer en la sociedad es una meta que hoy por hoy es imposible alcanzar.

Nos encontramos ante dos muros en cuanto a la publicidad, uno es el económico, el de más peso, pero también tenemos otro, que es simplemente que el hombre está muy cómodo en su posición de observador, no entiende esta humillación porque no la sufre, y además, le encanta poder ver a la mujer como objeto sexual. Esta es la base fundamental por la que la publicidad no dejará de utilizar la imagen de la mujer, porque esta visión del hombre hace que consuma.

Además de esto, como ya se sabe, al mundo de la publicidad le conviene seguir manipulando la imagen de mujer perfecta y seguir vendiéndonos este estereotipo para que las mujeres reales luchen, pero por parecerse a esta imagen, y no por sus derechos como seres humanos.

Un dato curioso que recoge marketing directo.com, son sobre el porcentaje de las compras, así, los datos de mercado no engañan y dicen que es preferible no utilizar ciertos estereotipos femeninos en la publicidad. Contrariar al público femenino puede salir caro, pues según establecen los datos citados por Ana María Olabuenaga, presidenta de Olabuenaga Chemistry, las mujeres compran el 85% de todo lo que se vende en el mundo, el 75% de las medicinas, el 50% de los coches (en Estados Unidos) y el 87% de la ropa interior masculina.
Esto refleja, que el machismo en publicidad no tiene ningún sentido si sus argumentos son sólo en base a las compras de los productos porque parece que son las mujeres las que realmente hacen las compras para ellas, y para los demás. ¿ Por qué entonces se sigue haciendo publicidad machista ?. Porque las mujeres no suelen protestar por las cosas que no les parecen justas, ese rol de sumisión y de no violencia que siempre se le ha imputado ha hecho su efecto realmente bien, y acompañado a la concepción de que son los hombres los que gobiernan el mundo y que protestar no les sirve de nada, hace que no se denuncien más casos de publicidad sexista-machista.


Esther Gómez Solaz

Los valores que vende la publicidad televisiva

Para hablar de valores de publicidad debemos situar el fenómeno publicitario en la esfera social de la comunicación pública. Sin olvidar que la publicidad desde sus orígenes se la ha relacionado con el mundo de la producción económica, ésta ha sido utilizada como instrumento de comunicación para aumentar las ventas de productos o servicios. Así también la publicidad ha sido un poderoso agente de conformación social, por ello ha proclamado ideales, ha influido en las modas y en las corrientes estéticas, ha configurado un género artístico y ha promocionado a determinados artistas, y ha contribuido a difundir unos determinados valores y estilos de vida muy por encima de otros.

Por tanto, la publicidad televisiva, se ha vuelto un comercio de valores, es decir una publicidad más emotiva que racional; en si es muy efectiva.

Los mensajes de la publicidad actual trabajan en un doble campo, por un lado la vertiente del marketing, que nos vende productos y marcas, por otro, la esfera de lo social, ya que los anuncios comerciales nos venden valores y estilos de vida que están asociados en los spots a determinadas marcas comerciales.

Los valores de la publicidad no es algo nuevo sino más bien, algo que siempre ha estado presente. Así, podemos destacar tres factores:

1. La orientación "psicologista"; este factor es considerado como el punto de partida de la investigación que se realizó en un inicio para conocer qué valores transmite la publicidad.

A través de esta investigación podemos ver que cada grupo de la sociedad tiene unas necesidades emocionales profundamente arraigadas, por ello el trabajo consiste en separar e identificar los problemas psicológicos que afecten a cada sector de una determinada población, de esta manera los creativos publicitarios podrán transformar los productos ordinarios y cotidianos en algo mágico, el cual se convierta en el remedio para las frustraciones de la audiencia. Éstas pueden ser las estrategias publicitarias con las que se manejaría una marca bien consolidada a la hora de realizar un anuncio publicitario.

2. La desorientación cultural en torno a los valores y las creencias. Este factor muestra la crisis de la identidad que afecta al sentido ético y a las creencias y por ello la publicidad ha asumido el papel de ofrecer valores firmes, seguros, incuestionables y pacíficamente aceptados por la mayoría. Muchos sociólogos aseguran que la publicidad ha venido a sustituir para muchos el lugar que anteriormente asignaban a la religión, a la escuela o a la familia. Sin ser exactamente así, la verdad es que muchos buscan su identidad en el mundo de las marcas a través de los anuncios publicitarios.

3. La importancia creciente de la televisión. La incontrolada mediatización por los mass media actualmente es una preocupación. Es algo que preocupa a los científicos, ya que ocupa un lugar principal en la creación del universo visual que nos rodea actualmente y del que obtenemos diariamente los datos que determinan nuestra imaginación general del mundo y de nosotros mismos. Con todo ello la distancia entre lo real, lo imaginario y lo publicitario, se emborrona.

No debemos olvidar que todo lo que sucede en la pantalla es puro simulacro, es decir, imágenes de imágenes, que nos muestran una apariencia de saber y al mismo tiempo cosas falsas, pero pocos se dan cuenta de ello.

Los anuncios televisivos, la fuerte carga visual y emocional son especialmente eficaces para la transmisión de actitudes y estilos de vida.

La capacidad de los anuncios para trasmitir valores culturales ha sido interpretada de forma opuesta.

Algunos dicen que la publicidad no crea ni impone determinados valores, sino más bien refleja fielmente las aspiraciones de una sociedad que se integra. Porque debe agradar a los consumidores, los anuncios siempre tienen un fin y éstos pueden ser el querer cambiar las creencias y los ideales de la gente.

Por ello, para muchos autores, la publicidad sería un espejo de los valores que ya están presentes en la vida social, y se deberían reforzar los valores que se descubren en los comportamientos de los individuos.

Después de haber visto los tres factores que se dan en la publicidad, vamos a conocer los valores de la publicidad y cómo se dividen.

1. VALORES DEL YO

• Éxito: poder, estimación y autoestima.
• Confort: comodidad, placer, disfrute.
• Atracción: belleza y seducción.
• Notoriedad: lujo, ostentación.
• Libertad: autonomía, independencia
• Seguridad, salud.

Estos valores, agrupan las tendencias egocéntricas de la persona y están centradas en conceptos como el éxito, la comodidad, el placer o la seguridad. Son los más usados en la publicidad ya que responden a una de las necesidades primarias del consumidor.

2. VALORES COLECTIVOS

• Juventud, movimiento y aventura
• Novedad, modernidad, moda
• Tecnología, progreso, futuro
• Trabajo, esfuerzo
• Calidad y tradición

Estos valores son los que unen a los demás, es decir, al grupo, a las aspiraciones sociales.

3. VALORES TRANSITIVOS

• Amistad, convivencia
• Ternura, amor, cariño
• Sentido de comunidad
• Servicio, solidaridad
• Ecología, naturaleza

Por último, estos valores implican salir de uno mismo para abrirse socialmente a los demás.

Podemos observar que la publicidad no refleja todos los valores de una sociedad, sino sólo aquellos que están más unidos a un estilo de vida consumista.

La publicidad no sólo muestra los valores que hay en la vida social, sino que promueve y difunde también determinados valores, es decir un estilo de vida consumista y con un mercado totalmente materialista.


Esther Gómez Solaz


Fuente: http://www.fundacioncoso.org/3/anexos/Que_valores_nos_vende_la_publicidad_actual.htm

Fuentes investigadas sobre sexismo y feminismo

• Experiencias desiguales. Conflictos sociales y respuestas colectivas (siglo XIX) M. Nash y S. Tavera.

• La ciudad de las damas. 1405. Christine de Pisan.

• A serious proposal to the ladies. 1694. Mary Astell.

• De la igualdad de los sexos. 1673. Poulan de La Barre.

• Importancia de la instrucción que conviene dar a las mujeres. 1784. Josefa Amar.

• Discurso sobre la educación física y moral de las mujeres. 1769. Josefa Amar

• La mujer y el hombre en la publicidad televisiva: imágenes y estereotipos. 2006. María Rosa Berganza y Mercedes del Hoyo.

• Hacia un planteamiento semiótico del estereotipo publicitario. Susana de Andrés del Campo.

• Valores y estereotipos femeninos creados en la publicidad gráfica de las marcas de moda de lujo en España. 2007. Paloma Díaz Soloaga.

• La mujer en la historia. 1992. Eulalia de Vega.

• El largo camino hacia la igualdad. Feminismo en España 1975-1995. Instituto de la mujer, Ministerio de trabajo.

• Identidad individual y coeducación. Diferenciación sin jerarquías. Instituto de la mujer, Ministerio de trabajo.

• La mujer y la pintura del siglo XIX español: 400 olvidadas y algunas más. 2009. Estrella de Diego Otero.

• La mujer en la historia de la ciencia. 2008. María José Borrego.

• La mujer y la educación física durante el franquismo. 2008. Juan Carlos Manrique.

• 25 años (1983-2008), una historia abierta. 2008. Instituto de la mujer.

• La mujer y la sociedad de la Información: ¿existe un lenguaje sexista?.2007. Fragua.

• La mujer en la publicidad. 2006. Instituto de la mujer.

• La mujer desde la Antigüedad hasta nuestros días: abordaje multidisciplinario. 2005. Lumen.

• 'El yihad de género' al servicio de los derechos de las mujeres. Entrevista con Asra Nomani. 2010. http://www.webislam.com/?idt=15036



• Conclusiones del I Congreso Internacional de Feminismo Islámico. 2005. http://www.webislam.com/?idt=2509

• Feminismo en el Islam. Núria Tendeiro Parrilla, València. Levante-EMV. 2008.

• La emergencia del feminismo islámico, publicado por oozebap http://www.oozebap.org/


• Percepción de las habilidades y aceptación de las mujeres directivas en las empresas de comunicación. Estudio realizado por Francisco J. Caro González, Mª del Mar García Gordillo, Carlos J. Rodríguez Rad y Gloria Jiménez Marín.



• La regulación y el control de la publicidad en el ordenamiento jurídico constitucional español, Boletín de la Facultad de Derecho de la UNED. 2008. María Luisa Balaguer.



• La desigualdad laboral entre hombres y mujeres. 2005. Virginia García-Lago.



• Estudio sobre el tratamiento de la variable género en la publicidad que se emite en los medios de titularidad pública. 2009. Ministerio de Igualdad. http://www.inmujer.migualdad.es/MUJER/publicaciones/docs/Tratamiento_Genero_Publicidad.pdf



• Estudio sobre las tecnologías de la información y las comunicaciones: un análisis desde la perspectiva de género. 2005-2008. Ministerio de Igualdad. http://www.inmujer.migualdad.es/MUJER/mujeres/estud_inves/758.pdf



• Estudio sobre la imagen de los y las adolescentes en el prime time televisivo, transmisión, consumo y recepción. Ministerio de Igualdad. http://www.inmujer.migualdad.es/MUJER/mujeres/estud_inves/820.pdf

Situación laboral de las mujeres

“El techo de cristal”, es una alusión metafórica a las posibles barreras transparentes que impiden a muchas mujeres con capacidad personal y profesional alcanzar posiciones en los entornos directivos y promocionarse dentro de ellos.

Las explicaciones sobre el techo de cristal son múltiples y variadas, pero tomaremos dos como vía de referencia: las mantenidas por Burn (1996, p.73) y la de Morrison y Von Glinow (1990).





Burn resume las razones para explicar la existencia del techo de cristal en siete puntos, a saber:

1. La creencia extendida de que la mujer ofrece menos capital humano a la organización (recursos individuales que ofrecen a la organización).
2. Creencia de que la mujer no dirige tan bien como los hombres (asumiendo que los hombres y las mujeres utilizan estilos de liderazgo, es más efectivo el usado por el hombre).
3. Existencia de estereotipos que hacen percibir a las mujeres como menos capacitadas para las posiciones directivas.
4. Las normas existentes en algunas organizaciones pueden favorecer la contratación y ascenso de los hombres.
5. En determinadas organizaciones las mujeres no pueden acceder a las experiencias necesarias para poder avanzar en la organización (las mujeres están en ocasiones estructuralmente en desventaja).
6. Las responsabilidades que las mujeres asumen en la casa y en la familia pueden impedirles la movilización en la organización.
7. La percepción por parte de los hombres, pero también de las propias mujeres, de que su compromiso primario está en la casa y en la familia.


Morrison y Von Glinow proponen tres teorías para explicar el acceso diferencial de las mujeres a los puestos directivos:

1. La teoría del capital humano (la mujer ha invertido menos en su formación y capacitación profesional). Teoría fácilmente rebatible con cifras en la mano: cada vez hay mayor presencia de las mujeres en la universidad desde el curso 1986-1987, y tienen mejores expedientes académicos y brillantez en los estudios.
2. Los grupos de presión (clientes, directivos...), a los que aún les afectan los estereotipos sexuales, y que pretenden mantener el status quo hacen muy difícil la igualdad entre hombres y mujeres.
3. Los grupos existentes en una organización reflejan la estructura y el reparto de tareas a nivel social, y es posible que las decisiones que atañen a las mujeres en el ámbito laboral reflejen los prejuicios de la sociedad.


Heilman (1995) concluye que el número de mujeres en puestos directivos viene influenciado por las percepciones de los hombres que tradicionalmente han dominado los puestos más altos en las empresas.

Más estudios:

Stephens y Greer (1995) encontraron que las mujeres necesitan más tiempo para ganarse el respeto en sus puestos de trabajo.


Otras investigaciones han tratado de explicar esta situación de desequilibrio:

Pablos y Tarifa (2003) analizan las causas que dificultan la conciliación de la vida laboral y familiar entre las mujeres periodistas. Los resultados muestran la escasa preocupación empresarial por el tema y destacan la percepción negativa de las mujeres frente a la maternidad en relación a su carrera profesional.


Esther Gómez Solaz

¿Quién gobierna España?

Trayectoria del PSOE

El PSOE fue fundado por Pablo Iglesias en 1879, aunque no tuvo representación parlamentaria hasta 1910, y en coalición con los republicanos.

Evolucionó hasta aparecer en 1931 (proclamación de la II República) como principal partido de la izquierda.

Formó parte de los primeros gobiernos republicanos (1931-33), y del Frente Popular que ganó las elecciones de 1936 y gobernó la zona republicana durante la guerra civil (1936-39).

Durante la II República y la guerra se vio roto por fracturas internas (tendencias más revolucionarias y más moderadas) y, al acabar el conflicto, apenas conservó ningún tipo de organización interior de España.

A partir de los años 50 se vio reducido a una organización radicada en Francia y controlada por militantes que habían ocupado puestos intermedios durante la República y la guerra.

Sólo durante los últimos años del franquismo, cuando la oposición al régimen se veía dominada por PCE, recuperó el socialismo alguna actividad interior.

En el Congreso de Suresnes de 1974, la vieja dirección republicana fue sustituida por dirigentes del interior encabezados por Felipe González.

A la muerte de Franco en 1975, el PSOE se vio ante la doble tarea, llevada a cabo con éxito, de absorber las diferentes organizaciones socialistas que habían proliferado un poco por todas partes, y de contrarrestar la hegemonía del PCE en los movimientos sociales de oposición al franquismo. Pero esto no le permitió ganarle a UCD las segundas elecciones generales (marzo de 1979).

Estalló la tensión entre radicales y moderados y, en el congreso de mayo del mismo año, Felipe González dimitió al no aprobarse la renuncia al marxismo, para devolver triunfalmente en el congreso extraordinario de otoño del mismo año.

Las consecuencias de aquel congreso fueron grandes: integración o marginación de la oposición interna, desplazamiento de los radicales a una posición marginal y reconstrucción del partido como una organización disciplinada y centralizada.

Como estrategia electoral, inició una oposición frontal a los débiles gobiernos de UCD, incluyendo los ataques constantes a Suárez y la manipulación de los conflictos internos del partido gobernante.

El objetivo:
Arrebatarle a UCD el electorado de centro y centro-izquierda. La UCD se colapsa en parte por la presión del PSOE y sobre todo por los conflictos internos y, en 1982, el PSOE obtiene una mayoría absoluta de 202 diputados sobre 350.

Desde su llegada al gobierno, el PSOE se configuró rápidamente como un partido clientelista (ocupación de los cargos directivos y medios de la administración con militantes) y como una máquina electoral al servicio de Felipe González.

Se mantuvo en el gobierno a lo largo de cuatro legislaturas consecutivas (hasta el año 1996) mediante los siguientes ingredientes: una actuación pragmática y atenta a las opiniones del electorado, la combinación de una imagen centrista (Felipe González) y de un discurso populista pseudoradical (Alfonso Guerra), destinados a diferentes segmentos del electorado, y la condición de único partido de implantación estatal, dadas las dificultades del PP para abrirse camino a Cataluña y el País Vasco, con una derecha nacionalista consolidada.

La lenta erosión en el apoyo electoral al PSOE fue acelerándose en buena medida por los escándalos de corrupción, de los que ya nadie se acuerda.

El goteo inicial de casos acabó convirtiéndose en alud, convenientemente instrumentalizado por la oposición y sus medios afines.

Las elecciones de 1993 aún las ganó el PSOE, gracias a la estrategia de minimizar la presencia del partido en la campaña y maximizar, en cambio, la de su líder.

Pero con episodios como la entrada y salida del juez Garzón en política, o la escandalosa fuga de Roldán, la llamada a un «cambio del cambio» que debería protagonizar el mismo Felipe González perdió toda credibilidad.

El PSOE perdió las elecciones de 1996 y se dio cuenta de que la estrategia de la oposición y de determinados medios de asociar corrupción con “felipismo” había triunfado (el PSOE se lo había puesto francamente fácil) y finalmente Felipe González se retiró, forzado por las circunstancias tan negativas de la corrupción.

La tarea de encontrar un sustituto a Felipe no fue fácil: los políticos consolidados durante la etapa felipista se resistían a perder su poder interno, y las luchas intestinas fueron impedir durante un tiempo (hasta la designación de Zapatero) abordar la difícil tarea de articular una alternativa programática creíble y suficientemente diferenciada al PP.

Zapatero intentó acercar al PSOE al gobierno mediante una estrategia de estatalización de su figura y del mismo partido (imagen de no crispación y constante oferta de pactos al gobierno).

Como resultado de las elecciones del 14-M de 2004, Zapatero pudo encabezar un gobierno minoritario con suficiente estabilidad, gracias a la imposibilidad política de una coalición contraria y los apoyos puntuales de IU y ERC, facilitados por la composición del gobierno catalán.

El PSOE ganó nuevamente las elecciones generales de marzo de 2008, con el 43% de los votos y 169 escaños, cinco más que en la anterior legislatura.

La gobernabilidad, sin embargo, se presenta bastante más complicada, en buena medida por las pérdidas electorales de IU y ERC.

En la actualidad ...

el partido socialista no pasa por sus mejores momentos tampoco puesto que la crisis económica mundial ha afectado como es lógico a España, y esto se traduce en una crisis política y de decepción de los ciudadanos que no ven cumplidos sus promesas electorales.


Según Antonio Gutiérrez, asesor de comunicación, los errores que ha cometido el partido socialista son los siguientes:

1. La improvisación.
2. La precipitación.
3. La confusión.
4. La imprecisión.
5. La descoordinación.

La improvisación


En cuanto a la primera, es cierto que algunos políticos tienen facilidad de palabra, gran empatía y dotes naturales para la comunicación. Pero, a veces, la importancia de los temas y la responsabilidad pública exige seguir un guión antes que dejarse llevar por la intuición.
Por ejemplo, la medida anunciada, matizada, rectificada y finalmente ampliada de la ayuda económica de 420 euros a los parados que han dejado de cobrar el subsidio es un ejemplo caótico de comunicación que llevó al mismo ministro de Trabajo a reconocer públicamente sus improvisaciones.
Para hacer una buena política y tener un buen gobierno se ha de empezar por tener una información de calidad sobre los asuntos y servicios públicos.
Leer lo que está escrito en el guión de los políticos no garantiza el éxito pero al menos, garantiza que es información contrastada y estudiada porque el guión lo ha elaborado un equipo de profesionales que se dedican a eso. Si el político empieza a improvisar cosas que no están en el guión puede cometer fallos de cálculo y hacerse notar ante la opinión pública que está hablando sobre un tema del que no tiene información ninguna, por lo tanto, lo que hará será el ridículo, cosa que aprovechará el adversario para echar por tierra, no sólo ese punto del mitin, sino todo el argumento del político.

La precipitación

La precipitación es la consecuencia desastrosa de una mala planificación, o más bien, de una nula planificación.
A veces se toman decisiones muy a la ligera porque hay que informar con mucha rapidez algún hecho. La consecuencia de esta aceleración es la de no contrastar las informaciones ni tampoco medir cuáles pueden ser las consecuencias de cara a la opinión pública.
También sucede que a veces las prisas se llevan por delante protocolos de actuación, leyes y normas que son doblemente exigibles a los responsables políticos.
Lanzar una serie de cosas a la opinión pública como son, medidas a tomar, nuevas leyes a aprobar, ofensas sin justificación al partido opositor, juicios subjetivos, etc, hace que la población primero se indigne y pierda la paciencia, y más tarde hace perder la credibilidad. Para lanzar un globus sonda hay que estudiar antes la adecuación al momento y lugar, hay que estudiar la idoneidad de su lanzamiento, si se lanza sin más, sin razonar, lo único que puede causar es un gran descontento y una opinión muy negativa hacia el partido. Por suerte, se juega con la mala memoria del ciudadano que de una vez para otra ya no recuerda los disgustos que le dieron.

La confusión

Las palabras cuando son ambiguas o confusas pueden tener graves consecuencias si llegan de un político, puesto que sus palabras son el principio de un iceberg de especulaciones que cada medio puede interpretar a su manera malintencionada o por puro desconocimiento.
La confusión trae consigo descontento, consecuencias económicas, y también políticas, puesto que puede acabar con el propio partido.
Una promesa política no es lo mismo que una información pública, y los ciudadanos llegan a confundir los deseos con las realidades por culpa de sus políticos. Tienen derecho a que no se les tome el pelo y a que no se les engañe de esa forma, porque si confunden deseo con realidad no es porque la población viva en las nubes, si no porque sus líderes políticos les han prometido cosas que no van a cumplir, y saben muy bien que no cumplirán.

La imprecisión

La claridad en la escritura refleja la claridad del pensamiento. Hay que decir las cosas lo más claras posible a los ciudadanos puesto que la jerga popular es la que mejor van a entender, no se trata de ser banales y decir las cosas con un lenguaje callejero, se trata de saber hacerse entender, de saber llegar al ciudadano.
Hay que hablar con más serenidad, claridad, y sobre todo con más sinceridad y honestidad, al ciudadano se le puede engañar una y otra vez, pero al final, aprende, y cuando se da cuenta de que le engañan, ya no creerá nada más de lo que le cuente su líder de partido, o su partido entero.
Hay que saber pedir perdón a tiempo cuando se cometen errores, y hay que decir siempre los datos como son, sin disfrazarlos según convenga.

La descoordinación

Las decisiones políticas en la vida pública se materializan en personas que atienden a los ciudadanos desde sus puestos de trabajo en las administraciones públicas y servicios, si hay una descoordinación en cuanto a ordenanzas y nuevas leyes de aplicación, estas personas no pueden hacer bien su trabajo, no se puede lanzar una medida y cuando el ciudadano acude a las administraciones para llevarla a cabo, encontrarse con mil trabas que no se han especificado con antelación, hace perder mucho tiempo a los trabajadores y a los propios ciudadanos, que se ven confundidos, engañados, y con un malhumor en crescendo.
Fuentes: MARTÍNEZ Sospedra (1996): Introducción a los Partidos Políticos, Barcelona, Ariel.

ANTONIO GUTIÉRREZ-RUBÍ, asesor de comunicación -- EL PAÍS - Opinión - 10-09-2009.


Esther Gómez Solaz

CSI

(Críticas a la Sociedad de la Información)




No podemos hablar de sociedad de la Información sin hacer referencia a las nuevas tecnologías puesto que la nueva sociedad de la Información se basa en ellas para su desarrollo.

El punto de partida del concepto lo podemos buscas en otro concepto, el de globalización, en este caso informativa.

Si nos detenemos un momento a analizar y entender lo que es la globalización, vemos que, éste consiste en un modelo de gestión de la corporación que trata de restar competencia a través de la integración de empresas, pero no ya en el ámbito regional o nacional, que quedaría pequeño en término de empresa, si no, una integración mundial o global de empresas, de modo que ya no se trataría de empresas individuales que compiten en mercados nacionales e internacionales contra múltiples empresas, de esta forma se convierten en una gran “masa” de empresas que juntas conforman una sola, una empresa multinacional que sobrepasa barreras geográficas y políticas. Lo que se consigue así, es que la competencia se reduzca notablemente y que las multinacionales sean empresas muy fuertes con establecimiento y peso en todos los países del mundo.

La globalización es un fenómeno que no sólo lo emplazaría en el mundo empresarial, también se puede ver cómo todas las personas, poco a poco, nos adentramos en ese fenómeno casi sin darnos cuenta, aquí es donde entraría en juego el papel que ejercen los medios en nuestras vidas.



No está únicamente globalizado el planeta en cuanto a productos, también lo estamos las personas, ¿por qué?, porque el papel que juegan los medios de masas en este proceso de globalización ha sido fundamental, los medios no sólo se dirigen a “la masa”, ellos mismos crean “masa”, en el sentido que provocan en cierto modo una misma forma de pensar en todos, unos mismos hábitos de conducta, unas mismas formas de reaccionar ante las cosas, una misma forma de sentir y apiadarnos de los demás, unas mismas ideas de justicia y de derechos, e incluso una misma ideología política, no sólo hay productos de moda, también hay pensamientos de moda, y si no piensas igual, no tienes cabida en este mundo global. Es decir, que la globalización de la comunicación a cargo de los medios se revela como una tendencia hacia el establecimiento de una cultura global.

¿ Otra sociedad de la información es posible ?

La Sociedad de la Información es uno de tantos conceptos, al igual que sucedió con Postindustrial, Globalización o Sociedad del Conocimiento, que han sido pervertidos por un uso político y mediático.

El concepto de Sociedad Global de la Información es el resultado de una construcción geopolítica e ideológica que, disfrazada con un tono de cambio, modernidad, tecnología y utilitarismo, ha conseguido dominar el mundo.

Con la intención de realizar una Genealogía de la Sociedad de la Información, Mattelart (en su obra sobre la historia de la sociedad de la información) se remonta a la Ilustración.

Los pensadores que conocemos como ilustrados tomaron el culto al número de la escuela pitagórica, que derivaría en la centralidad que la lógica binaria tiene en la tecnología, pero también toda una serie de teorizaciones entorno a la necesidad de una lengua universal, la construcción del Método científico o la construcción de un sistema métrico universal.

De ahí que se les sitúe como primer punto en la historia de donde arrancan algunas de las características de la Sociedad de la Información.

Por su parte, Saint-Simon supone el primer sistematizador que emplea la metáfora de la red, aplicada en este caso a la organización y basándose en las redes de transporte.

La obra de Mattelart concluye apuntando el peligro que supone caer en el discurso de la Sociedad de la información sin un talante crítico, ya que la sociedad de la información que se ha popularizado se refiere a un proyecto que no beneficia a la mayoría, sino que se ha construido sobre el mito de que va a beneficiar a la mayoría, es decir, tiene una fuerte carga ideológica que es la misma que rige el mercado. Por lo tanto la sitúa en la órbita de la construcción neoliberal del mundo.

El dominio económico de la comunicación es la base de la desigualdad y el control social. El desarrollo de la sociedad informacional está revolucionando el modelo tradicional de mediación, y el sentido mismo de la información. Pero el peso de la mayoría de los análisis de la globalización mediática recae en el factor tecnológico.

El trabajo de Manuel Castells representa el ejemplo más claro y acabado de descripción y definición conceptual de la sociedad.

La sociedad-red según Castells, se define por “la preeminencia de la morfología social sobre la acción como conjunto de nodos interconectados en los que la conexión anula la distancia, esto es, la intensidad y frecuencia de la interacción entre dos puntos o posiciones sociales se ve radicalmente alterada.”

Así, la idea de la red es de este modo un factor que constituye, como metacategoría, los cambios político-económicos, sociales y por supuesto, comunicativos, que emergen con el desarrollo del proceso globalizador.

La máxima expresión y prueba de esta lógica de la globalización de la sociedad, es Internet.

Los medios son, o deberían ser, tecnologías para la libertad, formas concretas de progreso y acceso a la cultura. Los nuevos dispositivos mediáticos son una forma de saber y transformación, tanto como una herramienta de poder y control de la mediación social.

Pero el concepto que tiene la población, y el que interesa al poder que tengan es otro distinto. A la población le llegan las nociones de gratuidad de la información, libertad de expresión, democratización de la cultura, desarrollo tecnológico y económico, etc.

Lo cierto es que la acción conjunta de las NTIC y el desarrollo expansivo de los intercambios económicos internacionales han favorecido una profunda reestructuración del trabajo intelectual y del campo de la cultura, en el proceso de ampliación del capitalismo que se globaliza a todos los campos y extiende su idea de producción también a la cultura e incluso a la propia sociedad.

Esther Gómez Solaz

Fuentes:


Trejo Delarbre, Raúl (2001). Vivir en la Sociedad de la Información. Orden global y dimensiones locales en el universo digital. Revista Iberoamericana de Ciencia, tecnología, sociedad e innovación. Número 1, septiembre-diciembre de 2001.

MATTELART, Armand, 2002, Historia de la sociedad de la información.



Esther Gómez Solaz

Para entender el feminismo ... lee esto

La historiadora Gerda Lerner ubica el nacimiento del patriarcado como un suceso histórico en el que se documenta el principio de la subordinación de las mujeres a través de los sistemas políticos, legales, culturales, religiosos y sociales.

También documenta las diversas evidencias de la existencia de una conciencia feminista a través de milenios en distintas sociedades del mundo y de la historia. Al recopilar estos escritos llega a la conclusión de que el proceso histórico documentado y transmitido como la historia universal no afecta de igual manera a los varones y a las mujeres, de hecho, ni siquiera las nuevas generaciones de estudiantes saben el nombre de mujeres científicas, escritoras, heroínas de guerra, filósofas, etc, porque sólo se estudian nombres de hombres, tanto es así, que nuestras calles llevan esos nombres masculinos en el 98% de los casos.

“ Cualquier aproximación cuantitativa al trabajo de las mujeres debe asumir que las cifras disponibles son limitadas e inexactas, por sí mismas y en relación a las del conjunto en especial, comparadas a la actividad laboral de los hombres ”. (Del período de la Industrialización). Experiencias desiguales. Conflictos sociales y respuestas colectivas. M. Nash y S. Tavera

Este sería un ejemplo de cómo en los libros de historia no se respetan los datos objetivamente y se oculta información. Pero se sabe que en 1839 la mitad de la fuerza laboral productiva pertenecía al sector femenino, y que en 1851, el 30% del total de la fuerza de trabajo, eran mujeres.

El conocimiento desarrollado a través de siglos por mujeres con conciencia feminista fue truncado una y otra vez. Las mujeres que reclamaban la subordinación o que se comportaban fuera de los esquemas asignados a su sexo, eran marginadas.

La falta de enseñanza a las mujeres sobre los logros de aquellas que fueron exitosas a través de la historia, es uno de los factores que han contribuido a la opresión de las mismas. Así fue que en el siglo XIX cuando la conciencia feminista se empezó a transmitir a otras mujeres es cuando se inicia el feminismo como movimiento social y político.

La Ilustración (época que enfatizaba políticamente la igualdad) y la Revolución Industrial (que originó grandes cambios políticos y sociales) proporcionaron un ambiente favorable a finales del siglo XVIII y principios del XIX para la aparición del feminismo y otros movimientos reformadores.

El capitalismo decía establecer el precio del trabajo en función de la clasificación y capacidad física del trabajador, y retribuir por lo tanto, desigualmente a hombres y mujeres. Vamos, un ejemplo de la discriminación basada en fuerza bruta y no en profesionalidad ni capacidad de elaboración de más tareas, ni cantidad de trabajo si quiera.

Es decir, que a lo largo de la historia, cuando los hombres necesitaron fuerza de trabajo, utilizaron a las mujeres para producir porque si se quedaban en casa, era mano de obra no explotada, pero claro, si cobraban la misma remuneración que un hombre, el prestigio del hombre y la supremacía y sometimiento de éste se perdía, porque todo se basaba en una ley de fuerzas, el más fuerte era el que mandaba; el hombre, y ahora el que más cobraba era el que mandaba; otra vez el hombre.

El primer acto feminista fue llevado a cabo por la francesa Olimpia de Gouges, quien parafraseó en 1791 la "Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano", designándole el nombre "Declaración de los Derechos de la mujer y de la Ciudadana". Pero la aprobación del Código Napoleónico, basado en la legislación romana, restringía en Europa cualquier posibilidad reivindicativa en ese sentido.

En Francia, los clubes de mujeres republicanas pedían que los tres ideales de la época (libertad, igualdad y fraternidad) se aplicasen por igual a los hombres que a las mujeres.

Pero no fue sólo la Declaración de Derechos del hombre la que negó a las mujeres el ejercicio de la ciudadanía, la radicalización de la Francia jacobina condujo a una centralización que eliminó toda actividad política independiente, los clubs femeninos fueron cerrados y las mujeres reprimidas.

Tras la consolidación del Imperio, el Código Napoleónico (1804), negó a las mujeres francesas los derechos civiles reconocidos durante el período revolucionario e impuso una legislación discriminatoria, según la cual el hogar era definido como el ámbito exclusivo de actuación femenina. Otra vez volvemos a la época de las cavernas, no sea que las mujeres dejen de ser unas sumisas esclavas del hombre y éstos pierdan el poder de dominación, imperialismo y explotación que tanto les gusta y tan bien les hace sentir a su ego.

En las revoluciones francesas de 1830, 1848 y 1871, las mujeres se movilizaron de nuevo para conseguir sus derechos. Reclamaban: derechos políticos, acceso a la educación, mejores condiciones laborales, y la legalización del divorcio.

El movimiento feminista de Gran Bretaña culminó con la obra "Vindicación de los Derechos de la mujer" (1792) cuya autora fue Mary Wollstonecraft, donde se reivindicaba el acceso a la educación; una educación semejante a la de los hombres. Wollstonecraft pensaba que el recibir una educación similar a la del hombre la acercaría a desarrollar su propia independencia económica accediendo a actividades remuneradas y la clave para superar la subordinación femenina, posteriormente John Stuart Mill influido por su mujer escribió en 1869 "El sometimiento de la mujer".
El feminismo norteamericano surgió gracias a las favorables condiciones sociopolíticas de la época; nació ligado a los movimientos protestantes de reforma religiosa; la mujer se concienció de que su situación era análoga a la de los esclavos. También fueron favorables para este movimiento las condiciones sociales y culturales que se daban en E.E.U.U.

El primer documento escrito con carácter feminista fue la "Declaración de Seneca Falls" (1848) en el que se denunciaban las vejaciones sufridas por la mujer a lo largo de la historia, entre ellas, el derecho de voto a los esclavos liberados desconsiderando el sufragio femenino.

Mujeres como Elisabeth Candy Stanton y Susan B. Anthony reaccionaron contra este hecho creando la National Woman Suffrage Association (2ª mitad del siglo XIX).

En España, se consiguió el sufragio en 1933, aunque el movimiento feminista en nuestro país no tuvo tanta envergadura como en gran parte de los países europeos desarrollados.

Las feministas españolas tuvieron una actuación social bastante reducida. Se inclinaban mayoritariamente por los asuntos sociales como el derecho a la educación o al trabajo que por reivindicaciones de tipo político.

Miguel Primo de Rivera, durante su dictadura, instauró la llamada Asamblea Nacional, en la cual quince mujeres tuvieron su escaño. Gran parte de las constituyentes pertenecían a grupos de aristócratas e intelectuales como Blanca de los Ríos y María de Maeztu.

El sistema dominador de la sociedad liberal española tuvo también influencia sobre la mujer mediante códigos como el Penal (1870), el de Comercio (1885) o el código Civil (1889), ante los cuales la mujer salía perjudicada sin tener apenas ningún tipo de libertades, derechos o privilegios.

La tarea primordial en la vida de la mujer sería su única y exclusiva dedicación a la casa sin tener oportunidad de salir de todo aquello que guardara una relación fuera del ámbito doméstico.

El papel de la mujer en el mundo fue superando ligeramente este ámbito doméstico en el que había estado atada. Mujeres incluso de clase baja no desperdiciaron la oportunidad y aprovecharon esta nueva visión del mundo que se les ofrecía, ocupando así más puestos de trabajo.

El número de mujeres en los estudios superiores impartidos en las universidades, profesiones liberales etc... que había sido inexistente, dejó de serlo ya a finales del siglo XIX.

A partir de 1920 el número de reivindicaciones fue creciendo, originando en Madrid en 1918 la primera "Asociación Nacional de Mujeres Españolas" (A.N.M.E), en la que se situaban Clara Campoamor y Victoria Kent como dos de sus dirigentes más representativas. Una asociación que tenía ya en sus manos el claro derecho al sufragio.

Otra de las asociaciones importantes fue la llevada a cabo por Carmen Burgos, "Cruzada de Mujeres Españolas"; quien protagonizó la primera manifestación callejera a favor del sufragio en Madrid en 1921.

La legislación de la II República española (1931-1936), supuso grandes avances en el reconocimiento de los derechos de la mujer y de su incorporación a la política. Aunque, estos primeros logros no fueron conseguidos en su mayor parte por los constantes esfuerzos de las primeras sufragistas españolas.

El movimiento feminista alcanzó, por primera vez en nuestro país, una cierta resonancia y participación social. Se llegó a conseguir, sobre todo por las ideologías que aportaban los partidos políticos (ya democráticos); lo que les obligó a una serie de reformas de las leyes discriminatorias, la igualdad en los derechos de ambos sexos, la concesión del voto femenino y la posibilidad de acceder a cargos públicos, como ya lo hizo Victoria Kent con la Dirección General de Prisiones, e introdujo eficaces reformas.

El sufragio femenino no fue defendido por todo el mundo. Personas como la misma Victoria Kent del partido radical-socialista o Margarita Nelken, socialista, y ambas diputadas de las Cortes Constituyentes, argumentaban en contra del voto femenino, QUE LAS MUJERES AÚN NO ESTABAN PREPARADAS PARA ASUMIR EL SUFRAGIO. Proponían que éste se aplazase. En realidad, Kent y Nelken defendían esta postura junto a otros miembros de los partidos de izquierda porque temían que las mujeres, al tener a su disposición el derecho al voto, optasen por los partidos conservadores desestabilizando así la República. Estos miedos se debían a que en aquellos momentos la población femenina estaba muy influenciada por el conservadurismo eclesiástico, el tradicionalismo de la iglesia Católica. Pero en contra de estas tesis se encontraba Clara Campoamor, diputada de las Cortes por el partido Radical. Esta mujer afirmaba sentirse ciudadana antes que mujer.

Finalmente, en las elecciones de noviembre de 1933, hicieron presencia algunas mujeres en las listas electorales: Concha Peña por el Partido Radical-Socialista, Clara Campoamor por el Partido Radical, Margarita Nelken por el P.S.O.E, Mª Rosa Urraca por los tradicionalistas y Pilar Coreaga por Renovación Española.

Los resultados de la primera vuelta fueron totalmente favorables para la derecha que consiguió el 40% de los votos, al contrario que la izquierda que consiguió el 20%. Los resultados sólo demostraban la dispersión de la izquierda. Pero, el fracaso fue motivo de exculpación y crítica contra el voto femenino, se les hizo en gran parte responsables a las mujeres de este fracaso, sin fundamento ninguno porque por ejemplo en Madrid con un 51% del censo femenino fue favorable a los socialistas. Sea como fuere, los partidos izquierdistas quisieron utilizar el voto femenino para ganar adeptos y al resultar un fracaso, volvieron a su pensamiento machista y excluyente.

Una vez más se evidencia que la lucha de las mujeres y la consecución de algunos derechos ha sido siempre por intereses que nada tenían que ver con su lucha, como siempre, solas ante todo, manipuladas por los poderes políticos siempre masculinos, y utilizadas por interés y no por convicción moral.

Todos los movimientos feministas y sufragistas estuvieron siempre dirigidos por mujeres de procedencia burguesa (es decir, capacidad económica, intelectual y de opinión propia mucho mayor). Éstas elaboraron las alternativas ideológicas, tácticas políticas e instrumentos estratégicos que desbordaban esta procedencia social dirigiéndose al conjunto de las mujeres, sin importar que éstas fueran burguesas o trabajadoras, sin embargo, el interclasismo de los presupuestos feministas no logró penetrar en ámbitos obreros y fue rechazado, en particular por parte del socialismo organizado. Socialismo que cuando le ha interesado para ganar votos de poder, sí que ha contado con las feministas, como es el caso actual, antes no le importó no luchar por unos derechos humanos porque no le beneficiaba darles poder a las mujeres, ni mezclarse con la burguesía por propio orgullo, pero en la actualidad, las luchas y reivindicaciones feministas están de moda de nuevo, y llevan el sello progresista en nuestro país, por lo que, por conveniencia y no por lógica humana y solidaria es por lo que se han hecho dueños de estas manifestaciones. Eso sí, al menos y aunque sea por conveniencia, van ganando posición.

En la España de antes, el modelo de género establecido en la sociedad liberal española garantizaba la subordinación de la mujer al varón, y ponía bases estrictas para su actuación social.

En esta época, no hay ninguna diferencia en la sociedad española entre personas liberales y conservadoras, entre personas de derechas y de izquierdas en lo que respecta a los derechos humanos de la mujer, no es cierto que unos sometieran a las mujeres y los otros estuvieran convencidos de sus reivindicaciones justas, absolutamente todos estaban en contra de que la mujer pudiera liberarse de una dictadura sexista, dictadura que por cierto, aún existe aunque malintencionadamente estén sabiendo disfrazar y disimular con leyes absurdas pero que suenan bien a la opinión pública adormecida y sectarizada, o con ministerios recién inventados ineficaces y efímeros.

Éstas son algunas opiniones fuera de sectores conservadores (los tradicionalmente tachados de machistas):

“ En sí misma, la mujer, no es como el hombre, un ser completo, es sólo el instrumento de la reproducción, la destinada a perpetuar la especie, mientras que el hombre es el encargado de hacerla progresar, el generador de la inteligencia, a la vez creador y demiurgo del mundo social “ Pompeu Gener (1848-1920) Republicano federal y escritor.

Y siguiendo el hilo de este “inteligente y grandioso escritor”, cito a continuación algunos textos de antiguos y contemporáneos filósofos, pensadores e ilustrados, que dejan evidencia de lo difícil que le ha sido a la mujer poder soñar con una igualdad. Para un hombre sólo es “algo gracioso e inocente”, para una mujer es vejatorio y humillante. El problema es no saber empatizar con los sentimientos de las mujeres porque nunca a lo largo de la historia han sufrido estas vejaciones.

“La mujer debe adorar al hombre como a un dios. Cada mañana debe arrodillarse nueve veces consecutivas a los pies del marido y, con los brazos cruzados, preguntarle: Señor, ¿que deseais que haga?”.
Zaratustra (filósofo persa, Siglo VII a.C)

"Todas las mujeres que sedujeran y llevaran al matrimonio a los súbditos de Su Majestad mediante el uso de perfumes, pinturas, dientes postizos, pelucas y relleno en caderas y pechos, incurrirían en delito de brujería y el casamiento quedaría automáticamente anulado."
Constitución Nacional Inglesa (Ley del Siglo XVIII)

“Aunque la conducta del marido sea censurable, aunque éste se dé a otros amores, la mujer virtuosa debe reverenciarlo como a un dios. Durante la infancia, una mujer debe depender de su padre; al casarse, de su marido; si éste muere, de sus hijos, y si no los tuviera, de su Soberano. Una mujer nunca debe gobernarse a sí misma."
Leyes de Manu (Libro Sagrado de la India)

“Cuando un hombre fuera reprendido en público por una mujer, tendrá derecho a golpearla con el puño o el pié y romperle la nariz para que así, desfigurada, no se deje ver, avergonzada de su faz. Y le estará bien merecido, por dirigirse al hombre con maldad y lenguaje osado."
Le Ménagier de Paris (Tratado de conducta moral y costumbres de Francia, Siglo XIV)

“Los niños, los idiotas, los lunáticos y las mujeres no pueden y no tienen capacidad para efectuar negocios.”
Enrique VII (rey de Inglaterra, jefe de la Iglesia Anglicana, Siglo XVI)

“Cuando una mujer tuviera una conducta desordenada y dejara de cumplir sus obligaciones del hogar, el marido puede someterla y esclavizarla. Esta servitud puede, incluso, ejercerse en la casa de un acreedor del marido y, durante el período que durase, le es lícito al marido contraer un nuevo matrimonio“.
Código de Hamurabi (Constitución de Babilonia, otorgada por el rey Hamurabi, que la concibió bajo “inspiración divina”).

“Los hombres son superiores a las mujeres porque Alá les otorgó la primacía sobre ellas, dio a los varones el doble de lo que dio a las mujeres. Los maridos que sufrieran desobediencia de sus mujeres pueden castigarlas, abandonarlas en sus lechos e incluso golpearlas. No se legó al hombre mayor calamidad que la mujer."
El Corán (libro Sagrado de los musulmanes, “dictado por Alá a Mahoma” en el Siglo VI).

"Que las mujeres estén calladas en las iglesias, porque no les es permitido hablar. Si quisieran ser instruidas sobre algún punto, pregunten en casa a sus maridos.“
San Pablo (apóstol cristiano, año 67 d.C.)

“La naturaleza sólo hace mujeres cuando no puede hacer hombres. La mujer es, por tanto, un hombre inferior."
Aristóteles (filósofo griego. Siglo IV a.C.)

“El peor adorno que una mujer puede querer usar es ser sabia.“
Lutero (teólogo alemán, reformador protestante, Siglo XVI)

“La hembra es hembra en virtud de cierta falta de cualidades.”
Aristóteles (filósofo griego. Siglo IV a.C)

“La mujer es, reconozcámoslo, un animal inepto y estúpido aunque agradable y gracioso.” Erasmo de Rotterdam (1466-1536) Filósofo y Teólogo holandés.

“Hay un principio bueno, que ha creado el orden, la luz y el hombre, y un principio malo, que ha creado el caos, las tinieblas y la mujer.” Pitágoras (580-500 a.C.) Filósofo griego

“El padre debe ser más amado que la madre, pues él es el principio activo de la procreación, mientras que la madre es tan solo el principio pasivo.” Santo Tomás (1225-1274) Teólogo y Filósofo italiano

“Hay tres cosas que jamás he podido comprender: el flujo y reflujo de las mareas, el mecanismo social y la lógica femenina.” Jean Cocteau (1889-1963) Escritor francés

“Desde la edad de seis años, la mujer no crece más que en dimensiones.” Severo Catalina (1832-1871) Político y escritor español

“Las mujeres son como las veletas: sólo se quedan quietas cuando se oxidan.” François Marie Arouet Voltaire (1694-1778) Escritor francés

“Las mujeres son como los caballos: hay que hablarles antes de ponerles las bridas.” Andre Maurois (1885-1967) Escritor francés

“Las mujeres están para ser gustadas. Después, unas se dejan, otras no…Eso va ya por provincias.” Camilo José Cela (1916-…) escritor español

“Al envejecer, el hombre construye su rostro y la mujer lo destruye.” Johann Wolfgang Goethe (1749-1832) Escritor alemán

“El dominio masculino es indispensable para que los hombres puedan apropiarse del producto de la fecundidad femenina.” EL CORAN

“¡Oh, qué plaga, qué aburrimiento, qué tedio es tener que tratarse con ellas mayor tiempo que los breves instantes en que son buenas para el placer!.” Francisco de Quevedo (1580-1645) Escritor español

“Por muchas razones no es bueno que la mujer estudie y sepa tanto.” Jean-Baptiste Poquelin Mòliere (1622-1673) Dramaturgo francés

“Si la mujer fuera buena, Dios tendría una.” Sacha Guitry (1885-1957) Dramaturgo francés

“Apenas han encontrado marido, se convierten en máquinas de fabricar niño, en perpetua adoración por el fabricante.” Henri Beyle Stendhal (1783-1842) Escritor francés

“El secreto del alma de las mujeres consiste en carecer de ella en absoluto.” Enrique Jardiel Poncela (1901-1952) Escritor español

“Emancipar a las mujeres es corromperlas.” Honoré de Balzac (1799-1850) Escritor francés

Esther Gómez Solaz

Influencia de Internet en la Comunicación política

La red de redes ofrece una serie de ventajas desde que fue lanzada al gran público a mediados de los años noventa.




Estas ventajas son:


Frente a la unidireccionalidad característica de la prensa escrita y la radio-televisión, la Red genera un modelo bilateral. Los flujos de información son de ida y vuelta, no únicamente de ida.


Interactividad; unido a lo anterior, los usuarios son generadores de contenido, no sólo meros receptores.


Actualización, rapidez; Sin Internet, la información es periódica, se dan las noticias con un tiempo de letargo, no pueden darse en el mismo instante en que suceden. Los medios tradicionales utilizan la Red de forma complementaria, a la vez que surgen servicios específicos de información online. En la Red es más sencillo y barato actualizar constantemente la información.


La superabundancia; Los medios digitales pueden transmitir una mayor cantidad de información en menor tiempo y a escala universal. No hay límites a la cantidad de medios que pueden existir en la Red, tampoco los hay al volumen de información que cada uno de ellos puede ofrecer al usuario y, además, el costo de publicar la información en Internet es prácticamente equivalente para todos.


De la intermediación a la desintermediación; La Red ha puesto en cuestión una de las funciones básicas de los medios tradicionales: la mediación profesional en los procesos de acceso a las fuentes por parte del público. Las funciones tradicionales como la búsqueda de información, el filtrado de la misma, su contraste, su edición y publicación, han dejado de ser patrimonio exclusivo de la profesión periodística. Hoy, la Red permite el acceso directo del público a las fuentes de información sin la mediación de los comunicadores profesionales, así como el acceso a un sistema mundial de publicación que funciona, todavía en cierta medida, al margen de los editores de los medios tradicionales.


Internet es un medio muy selectivo, sobre todo en términos educativos y económicos.


Adquirir información valiosa y plural a través de la Red requiere un esfuerzo, así como un cierto grado de interés y de formación, debido a las propias características de la información online.


El hipertexto exige nuevas destrezas comunicativas y un mayor esfuerzo de lectura. La desarticulación del texto, su fragmentación y la posibilidad de enlazarlo con cualquier otro texto disponible en la Red, desvanece el paradigma lineal, y con él desaparece también la unidad, la autonomía, la estructura y a veces hasta la coherencia y el sentido propios de los textos escritos y audiovisuales. De ahí el carácter activo de Internet frente a otros medios de uso más sencillo como la TV.


El hecho de que con Internet pasemos de la abundancia a la superabundancia de información tiene un efecto parecido. En realidad, este cambio nos obliga a pasar de la información al conocimiento, lo que nos exige mayores destrezas comunicativas y una cantidad de tiempo de la que no siempre disponemos, lo que devuelve a los medios establecidos buena parte de su importancia estratégica: Más que antaño, necesitamos mediadores que busquen, filtren e interpreten la información.


Esta posición estratégica de los medios establecidos se ve reforzada por la nueva temporalidad mediática. El paradigma de la inmediatez hace saltar por los aires, en muchas ocasiones los mecanismos de control, verificación y contraste de fuentes.


Además, si cualquiera puede colgar lo que quiera en la Red, surge un problema de credibilidad.


Todo ello multiplica la necesidad de recursos por parte de los usuarios, lo cual, beneficia a los medios convencionales.


Además de que existen límites para contribuir a la autonomía de la opinión pública y a la participación política, las elites políticas establecidas, finalmente han descubierto la Red. Han tardado, de tan volcadas como estaban en la TV, pero han terminado comprobando que Internet les resulta útil en diversos aspectos que refuerzan en lugar de contrarrestar, los rasgos de la «democracia centrada en los medios».


Internet les sirve como instrumento para la desintermediación de la información, para la publicidad y para la recaudación de fondos.


Como Instrumento de desintermediación: Las técnicas de persuasión empleadas por las élites políticas pasan por un eficaz control de la agenda política, de los temas presentes en la esfera pública y de los atributos vinculados a ellos. Y, en este punto, los políticos tienen que vérselas con las prioridades de los medios.


Es por ello que valoran las posibilidades de desintermediación y una de las características de la información online es, precisamente, la desintermediación. Así pues, no es de extrañar que los políticos hayan descubierto finalmente, las posibilidades que ofrece el nuevo canal en este terreno.


A medida que Internet se expande, pueden dirigirse a la ciudadanía sin mediaciones profesionales y, a la vez, unificar el mensaje ante las variadas agendas de los medios. Y todo ello a un coste comparativamente bajo.


Como Herramienta publicitaria: Las élites políticas establecidas pueden encontrar en Internet posibilidades interesantes en el terreno más estrictamente publicitario, y también a un coste comparativamente bajo.


Recaudación de fondos: En Estados Unidos (el paraíso de la democracia centrada en los medios y del poder del dinero en la política) es ya frecuente el uso de Internet para la recaudación de fondos. De hecho, éste ha sido un ingrediente clave en la campaña de Obama para las presidenciales de 2008, en el que por cierto han participado nuestros propios políticos, manifestándolo públicamente.


Fuentes:
CASTELLS, M. (1996): «Ciudadanos, ¡al Internet!», El País, 17-02
CHERTA, E. (2003): «Internet y la comunicación política»




Esther Gómez Solaz

La Comunitat Valenciana